Ya no era raro, ver en estos días, la imagen anaranjada e indescifrable de una Abencia Meza sorteando las cámaras, ni los photoshops del recuerdo junto a la desaparecida Alicia Delgado. Ya no era raro verla en las portadas de los principales diarios: La República, Perú21, etc. La imagen del escándalo había dado un salto democrático y demagógico, de los diarios chichas a los serios. Un trasvase sociológico que escalaba las imprentas al igual que los personajes que retrataba. Aquí no hubo ni preferencias de los sectores CD, ni susceptibilidades sorprendidas de los AB. Aquí todos nos mojamos en una sola marea roja de curiosidad. Y al decir “todos”, es TODOS. Si no lo creen, chequeen las portadas del bien peinado Gestión, del combativo La Primera, y del decano El Comercio.
Si Mirko Lauer lo dice...:
"Para los gurús de los diarios de S/.0.50 el caso de la cantante Alicia Delgado pertenece de lleno al pan de cada día. ¿Pero por qué el vehemente interés del resto de la prensa y de gente de toda condición? La posibilidad de que su colega y probable amante Abencia Meza sea la autora intelectual del asesinato ha llegado a la hasta hace poco circunspecta primera plana de El Comercio, y a todas las demás."
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