Hora Zero, la reunión de los poetas - muestra fotográfica

A propósito de la presentación de "LOS BROCHES MAYORES DEL SONIDO"
(LIMA: Fondo Editorial Cultural Peruana, 2009)
Antología de TULIO MORA".

Fecha: 03 de noviembre.
Hora
08:30 - 21:30.
Lugar:
Biblioteca Nacional del Perú - Av. de la Poesía 160 San Borja


















El homenaje a Bruno de Olazábal, por Jsudaka

Nuestro amigo Jsudaka, Jona -o Jonathan Castro para los amigos-, hizo este excelente trabajo para La Mula.pe, recordando a uno de los reporteros más talentosos y auténticos que ha tenido la televisión peruana:
"Los primeros recuerdos que tengo de Bruno de Olazábal son por culpa de mi madre, una necia seguidora de sus trabajos en La Revista Dominical, con Hildebrandt, con Beto, en Cuarto Poder y Paralipómenos, ese bastión subte de resistencia que tenía en Radio 1160. Hoy se cumplen 6 años desde que se fue y, por lo menos, tenía que hacer este homenaje reuniendo a algunos de sus viejos amigos con los que hizo periodismo" (Jona).



El diario La Razón y los blogs

Uri Ben Schmuel, el director del diario La Razón, opina sobre el caso de los trascendidos a través de los blogs en su columna “Los muertos que vos matáis...”, que entre cosas dice:

Y es cierto. Los blogs revolucionaron las reglas del periodismo. Sobre todo aquella de no publicar algo sin verificarlo previamente. La noche del miércoles lo comprobamos de primera mano, al asistir a la ceremonia en USIL (…). La comidilla entre los invitados era que el presidente García iba a ser padre de nuevo. Incluso alguien nos dijo que un amigo suyo había visto un análisis con resultados positivos de una prueba de embarazo.


Quien esto escribe es un periodista “tradicional”. Trató de verificar la información y como no fue posible, decidió no publicar la “noticia”. “Tonto”, nos dijo el mismo que juraba que su amigo había visto el análisis, “te estás perdiendo una primicia”. En cambio, una blogger “revolucionaria” que asistió al evento puso esa misma noche en su bitácora la “primicia”.

Hasta ahí, normal. Se entiende cada punto.


Pero hoy en su mismo diario que es un medio, según lo que uno deduce de su propio director, “tradicional”, ético y periodístico, publica la siguiente noticia “Yehude Simon: Fujimori puede ayudar al país”.


Entonces uno queda intrigado por la revelación, pero la sorpresa dura poco al conocer el verdadero sentido de la nota: “(Yehude): Si fuera presidente sí conversaría con Alberto Fujimori porque él puede ayudar mucho al país, podría reconciliar al país reconociendo errores.”


Entonces los amigos de La Razón, los ases de las carátulas, ¿actúan de acuerdo a su código de ética como para criticar la levedad tramposa de los blogs?

¿Quién fue el autor intelectual del presunto segundo hijo de Alan García?

Paola Ugaz, a través de su blog, lo reveló ahorita:
"El periodista Phillip Butters, conductor de Frecuencia Latina, Radio Capital y columnista del diario “La república” fue el que propaló el rumor de la existencia del inexistente sétimo hijo del presidente peruano, Alan García.

Al llegar a Frecuencia Latina tras asistir a la reunión política donde se condecoró a varios señorones de nuestra clase política en la USIL, el periodista Phillip Butters le aseguró a la periodista Claudia Cisneros y al periodista Eduardo Guzmán, que Alan Garcia y Cuqui Cheesman esperaban un segundo hijo, motivo por el cual, se habría producido un distanciamiento físico con su esposa Pilar Nores.

Además Butters aseguró que tenía un vídeo del astrólogo de nombre Jumbo, donde él le revelaba que le hizo la carta astral del futuro bebe y de los presuntos padres. La elocuencia y la seguridad que destilaba hizo el resto del trabajo.

Luego, la periodista Claudia Cisneros hizo el post donde confío a ciegas en la fuente y devino en lo que todos sabemos.

¿Por qué, Lima siempre sigue manteniendo el rezago colonial del chisme sin comprobar de la tertulia, del palanganeo sin prueba y de la valentía que otorga el vino del coctelito?.

Esperamos que Butters, asuma su parte de culpa en este lamentable entredicho".

¿Será cierto? ¡¡¡Te-te-te... advierrrrrrrto!!!

“CAXAMARCA, Eventos y Servicios” - Sólidos y Confiables

(Aparecido en la revista cajamarquina Nuestra Gente de Febrero del 2009)

U
n carro alegórico es como la cereza del Corso carnavalesco; claro, después de la reina, o bueno, casi al mismo nivel. ¿Qué reina no se preciaría de tener la mejor movilidad con el mejor motivo? Ese es el punto: una mujer hermosa sobre un vehículo que hable por sí mismo y diga: soy seguro, confortable y bonito. ¿Y quién puede brindar ese servicio? ¿Quién puede elaborar
mediante esfuerzo e ingenio un transporte que cumpla con los requerimientos de seguridad y que tenga ese necesario criterio artístico?

Averigüémoslo.


En Cajamarca hay una familia que se ha especializado en el rubro. Es la familia Cabellos. Una familia que ha transmitido como herencia, no solo el amor por el Carnaval, sino también el cariño por el trabajo que representa brindar los mejores servicios, por ejemplo, en infraestructura para eventos. Don Víctor Cabellos Cruzado, el jefe de la familia, muy activo y servicial desde hace treinta años, fue en su época uno de los más entusiastas organizadores de las festividades carnestolendas en el Barrio San Sebastián. “Él vestía a las reinas, por ejemplo” “Él reactivó el Festival de la Chicha y el Pan cuando ya iba en picada”. Es evidente el orgullo que demuestran sus hijos, los que ahora le rinden homenaje con la empresa propia.


En “CAXAMARCA, Eventos y Servicios”, Av. El Maestro 306 (Barrio La Colmena), encontramos a Luis Cabellos y a Víctor Cabellos (hijo) coordinando asuntos correspondientes a la empresa familiar. Afuera corre una aire frío. Conversamos en la oficina mientras nos muestran fotos de todo lo que ofrecen. Es sorprendente el nivel de profesionalización al que han llegado, tomando en cuenta que se iniciaron hace unos tres años, “con un toldito, cuatro tubos, una escalera y un triciclo para transporte”, como dicen. En la competitividad está el secreto: ofrecer un buen servicio al cliente, básicamente un compromiso, y luego la gente se encargará de hacer publicidad buena de boca en boca.


Ellos se encuentran trabajando ya desde noviembre. Pronto no habrá tiempo ni para dormir. Entre lo que ofrecen como producto está la construcción de los clásicos carros alegóricos, desde el diseño de la armazón, la soldadura, la cubierta de tela, pintura especial acrílica, “gras natural”, bombas de agua, una estructura especial para la reina, hasta una adecuada instalación eléctrica. Por eso se entiende que sus trabajos hayan ganado varios años consecutivos. El precio de tal despliegue depende, por ejemplo, del largo de la plataforma con la que trabajen. Lo han hecho con plataformas de hasta 14 metros. Un carro se llega a entregar un día antes del Corso absolutamente terminado. También ofrecen palcos, pero no como los que estamos acostumbrados a ver derrumbarse cada año. No, sino unos realmente confortables y cómodos, de madera ancha, tubo galvanizado y pernos gruesos muy seguros. Se trata de un sitio VIP que no discrimina condiciones y que brinda asistencia de seguridad como 911, vallas de contención, baños Disal, toldos para el sol y lluvia, comida, cerveza, gorros y polos (para cuya confección viajan hasta Lima)…y este año, una banda de músicos. Han fabricado inclusive las torres desde donde filma la televisión, y dentro del concepto de alquiler de escenarios para eventos, el escenario en el que se presentó el afamado Grupo 5, cuya construcción bordeó los 240 mil soles. Pura chamba.


Nos explican que prefieren trabajar con empresas e instituciones, como bancos o Universidades. No confían del todo en los barrios, dicen que no son tan cumplidos a la hora de pagar. Pero también han laborado con provincias como Magdalena o Jesús. Todo depende de que se respete el contrato. Pero nada es fácil, si se quiere apostar a ganador se debe invertir, y a veces -o generalmente- esa inversión es fuerte (unos 7 mil soles por carro, como muestra): eso es negocio.


A pesar de que existen otras empresas similares, “CAXAMARCA, Eventos y Servicios”, de la familia Cabellos, ha sabido distinguirse desde sus inicios por el compromiso que tiene con sus clientes. Un compromiso que implica lazos tan fuertes y sólidos como sus mismas plataformas de tubo galvanizado. De hecho, un ejemplo.

Alan García, el novelista: "El Mundo de Maquiavelo"

Esta joyita es, si no me equivoco, de CARETAS

El no-hijo de Alan García y la respuesta de Gorriti, el novelista

El no-hijo

A los que seguimos a Claudia Cisneros a través de su twitter @claudiacisneros , nos sorprendió la bomba que soltó ya de madrugada a través de su blog:
"Esta noche, sin embargo, en una reunión de veteranos, vigentes y reincidentes políticos de la escena nacional , se habría develado el misterio. La comidilla de la noche entre la clase política es que el presidente Alan García estaría por convertirse en padre otra vez, que Roxanne Cheeseman, madre de su hijo último hijo, Federico Danton García Cheeseman, tendría ya poco más de dos meses de embarazo."

¿Cómo y cuándo lo darían a conocer? ¿Sería la gota que rebalsaría el jarro de paciencia de Doña Pilar? ¿Se vendría una crisis familiar en el entorno del presidente? El tiempo nos traerá las respuestas..."
Y ojo que Claudia lo pone en condicional. Pero a estas alturas las críticas caerán sobre los blogs a diestra y siniestra. El presidente ya hizo su "extraño" desmentido en RPP. Ojo, solo lo del hijo, no lo de Pilar Nores, que por otra parte es cuestión puntualmente personal.



Respondiéndole al cuentista

Pero la cosa no quedará así, se dijo Gorriti, y hoy la periodista Paola Ugaz reproduce en su blog la extensa carta de Gustavo "Chuck Norris" Gorriti a García, a propósito de las declaraciones del mandatario sobre el libro Petroaudios.

Carta de la que reproducimos unos fragmentos:

Señor Alan García Pérez
Presidente de la República
Palacio de Gobierno
Ciudad.

Estimado señor García Pérez:

(...)

En el libro cuento (páginas 87 y 88) que: “Durante la campaña electoral de 2005-2006, fuentes familiarizadas con el pensamiento de Ponce Feijóo sostienen que el entonces candidato Alan García lo convocó a la oficina que tenía en el Paseo de la República, cerca del edificio de RPP ‘cuando apareció lo de (el audio) de Popi (Fernando Olivera) y (Genaro) Delgado Parker’. Eso fue en octubre de 2005”.

“De acuerdo con versiones confiables, Ponce Feijóo le contó a García que sus comunicaciones electrónicas –incluso correos electrónicos muy personales– habían sido interceptadas y penetradas antes de su regreso al Perú. Ponce Feijóo habría añadido que nada se hizo público entonces porque él se cuidó que no saliera y guardó la información”.

“Según el mismo relato, García y Ponce Feijóo bajaron al semisótano del edificio y ahí discutieron rivales electorales: ‘Usted ayúdeme con el comandante que yo me encargo de la Gorda’, habría dicho García. La referencia volumétrica era a la candidata Lourdes Flores, quien entonces tenía más sobrepeso que García”.

“Todo indica que Chito Ponce ayudó, porque luego hubo algunos apristas prominentes, entre ellos Agustín Mantilla, que sugirieron que aquel fuera nombrado jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia. También, como es sabido, hizo luego ‘barridos’ electrónicos en el Congreso, a petición de Mercedes Cabanillas”.

“Ante eso, tal cual indican fuentes cercanas a Ponce Feijóo, la recompensa del nuevo gobierno fue pronta y explícita. ‘Como dijeron en la sentencia a Fujimori: está probado que el presidente García le dio (a Ponce) el grado a los tres meses de haber entrado. ¿Fue gratis? No lo fue –dice la fuente–, le dieron el grado de contralmirante porque ayudó a que sea presidente’”.

Crítica de "La Maldición de las Hermanas"

Cuyo título original sería algo así como “Los no invitados”…

Un film de fantasmas, de enredos psicológicos, remake de la película coreana A Tale of Two Sisters del 2003. La historia de dos hermanas que buscan una verdad que al final se les revelará insospechada y terrible.


El film no hace aportes nuevos al género Terror. Es previsible y efectista. Una clase B dentro de otra clase B. Solo impactan sus efectos de sonidos, claro dentro de la acústica de un cine moderno.


Parece que desde Sexto Sentido no ha habido una idea que refresque los giros de tuerca de los thrillers de terror. Todos apelan a la revelación final de los no existentes. La novedad se ha extinguido. Y la forma preferida para rellenar los semi-clímax son las visiones de cadáveres retorcidos a lo El Aro y los “golpes” de sonido in crescendo con violines acuchillando.


De esa manera es fácil explicar la historia por más descabellada o sosa que sea. Todo era cosa de la mente o del fantasma.


La Maldición de las Hermanas es un film menor, en realidad imprescindible.



Cuando el amor se vuelve una guerra civil

Por Alan Luna


Cuando el amor se vuelve una guerra civil es mejor abandonar el barco sin rozar la proa. Cuando el matrimonio se convierte en una productora multifuncional de niños para el psicoterapeuta es necesario exiliarse de la manera más profesional para evitar daños colaterales. Cuando las relaciones no tienen su Waterloo piadoso, o su Sahara ardiente, es mejor sacar los alfileres vudú del corazón y retirarse a la Meca de la libertad. Pero eso sí - y de hecho- nadie saldrá ileso. Nadie podrá hacerlo.


Entonces te colgarás un rosario de canciones cursis en el cuello para espantar ilusiones. Porque creerás que, en relación inversa, éstas serán más devastadoras progresivamente. Y -ojo- que se entienda que ésta no es una receta exclusiva de la culinaria femenina. Se ha visto a chefs llorar con una cebolla. Y se ha visto a King Kong doblegado ante un bolerazo efectivo (casi ilegal) de Agustín Lara.


Pero, empezando por el principio (lugar común), el amor no nos cayó del cielo (cuestiones dialécticas), sino nos subió por las rodillas, entiéndase: el celo.


En algún extraño y maravilloso momento de la evolución se fusionaron dos culebras de una misma cabeza: la agitación hormonal, perpetuadora de la especie, y la costumbre “redescubierta” por algún miembro de la tribu. Y no se sabe en qué momento, y los escáneres sobre la momia no podrán determinarlo, alguien murió de amor por primera vez.


Así que explicarlo sería entrar en un juego de infinitas trampas. No queda de otra que avanzar. Aunque sea en círculos. Avanzar.


Claro que podemos definir las cosas por sus clichés. Y asumir que el desamor (de forma superficial y televisiva, obviamente) se puede comparar con el luto en su parafernalia. Hemos visto a funcionarios públicos ir a sus oficinas y sonreir a todos, pero con el corazón roto en veinte pedazos en un compartimiento de su maletín James Bond. Digamos que en ese sentido todos sí somos iguales bajo el sol. No habrá doctorado, chaleco, ni suero que te acompañe en el trance más espinoso. Y si es cierto que un clavo saca otro clavo, alguien debería repartirlos piadosamente, o Woody Allen inventar otro orgasmatrón para los que quieran anestesiarse felizmente por un par de años. O quizá, y sólo es una idea creativa, la criogenización como alternativa.


Rehusándose este breve tema, con vida propia, a morir mal… podemos resumir la historieta en algunas certezas (bastante huachafas, dicho sea de paso). Para muestra: siempre te recordaré, el tiempo cura las heridas, hay muchos peces en el mar, si tú eres feliz yo soy feliz, ya encontrarás a alguien que te valore, lo nuestro es especial, eres mi alma gemela, te quiero sólo como amigo, a nadie amaré como a ti, no quiero ilusionarme, pero podemos seguir viéndonos, te bajaré las estrellas,…hasta que la muerte nos separe, etc., etc., y un etc. más.


El extraño caso de la sanción a Turbo Mix en Cajamarca

Para los cajamarquinos es sabido que el medio en referencia no se caracteriza precisamente por su respeto a las normas de la dignidad ciudadana y del periodismo en sí.

Pero el caso tal como se plantea genera confusiones por lo enrarecido de sus alcances jurídicos, por decirlo de algún modo.

A Turbo Mix se le multa por haber incumplido con el horario de protección familiar y su código de ética. Hasta ahí perfecto. Pero analicemos, 1.- Bajo esa concepción no existiría ningún canal de Lima, y probablemente una buena parte de los de provincia. ¿Horario de protección al menor? ¿Han visto televisión peruana últimamente? 2.- Por no cumplir con su mismo “código de ética”. Todo lo anterior es aplicable a este punto. ¿Códigos de ética en el caso del periodismo y los Petroaudios, por ejemplo?


Ustedes digan.


Aquí también interviene la dicotomía del héroe impresentable. O sea, un medio puede terminar convirtiéndose en el abanderado de la Libertad de Prensa gracias a una denuncia que en el fondo puede tener cierto sustento; pero que, sin embargo, por ser presentada por una autoridad termina desestimada y reconocida como opresión o censura. No por nada el principal demandante es el Alcalde de Cajamarca: el “plato de fondo” de algunos programas de Turbo Mix.


Pero entonces si debieron sancionar a Turbo Mix debió ser cuando el Alcalde interpuso una demanda por difamación en primera instancia y no por no cumplir con una falacia tan peruana como lo del horario de protección al menor que aquí nadie respeta, y lo que terminaría prestándose a muchas suspicacias.


Todo un embrollo.


Asi informa El Comercio:

“El Ministerio de Transportes y Comunicaciones impuso al propietario de radio Turbo Mix una multa de S/.7.100 por violar el horario de protección familiar y su propio código de ética . La sanción se impuso tras la denuncia interpuesta por el alcalde provincial de Cajamarca, Marco La Torre Sánchez.

El burgomaestre presentó su denuncia ante el ministerio, pues en la radio se emitían palabras soeces contra él. Tras recibir la denuncia, la Dirección General de Control y Supervisión de Comunicaciones pidió la opinión no vinculante del Consejo Consultivo de Radio y Televisión, Concortv, de acuerdo con la Ley de Radio y Televisión.

Según la Resolución Directoral 711-2009-MTC, el medio de comunicación emitía de manera reiterada ofensas e insultos dentro del horario de protección al menor.

Wilfredo Huaripata Aguilar, propietario de la empresa, dijo que había pagado de inmediato la multa, por lo que esta se redujo a S/.4.100. Acotó que la denuncia del alcalde provincial de Cajamarca contra su medio era un acto de “amedrentamiento”.

CLAVE
Esta es la primera vez en que un medio del país ha sido sancionado por incumplir el horario de protección familiar y su código de ética debido a la queja de un ciudadano y a la negativa del medio por autorregularse.

Un usuario de La Mula.pe nos deja el siguiente comentario que vale la pena

chequear:

“Lo que pasa es que el MTC (y menos el CONCORTV) pueden sancionar a un medio si es que un ciudadano no se queja antes. Y en el Perú nadie se ha quejado formalmente contra un medio de comunicación. Este es el procedimiento según la Web del CONCORTV: http://www.concortv.gob.pe/es/index.php?option=com_content&view=article&id=125&Itemid=43

Alejandro”

De igual modo, si la multa fue pagada, es una manera de aceptar los cargos.


Esperemos una convivencia pacífica de aquí en adelante.

Visite el barrio El Estanco en Cajamarca

Aparecido en la revista cajamarquina Nuestra Gente - Febrero del 2009



por
Alan Luna


Conozca el porqué de su denominación y cómo viven sus

pobladores las proximidades del Carnaval cajamarquino...


Abajo, en el plano de la ciudad, pocas personas dan con la ubicación exacta del barrio “El Estanco”. Preguntar, entonces, es un sondeo necesario. Y uno empieza -una vez surgida la idea- por su realidad inmediata, por ejemplo, un cobrador de combi, pero la respuesta es negativa. No sé, joven. Y bueno, cuando alguien que domina las líneas y rutas de Cajamarca no conoce un lugar te empiezas a preocupar. Un taxista amable te responde algo similar, y también una señora que vende jugos, y un guardián, y un ambulante, y un tendero, y un amigo por el Messenger. Todos, igual: no sé.


¿Puede ser tan ajeno un lugar? Parece que sí. Y solo queda caminar deduciendo señales y preguntando constantemente, hasta dar con una indicación más o menos segura, “joven, eso está detrás de San Ramón”. Y uno obedece con optimismo, pero cuando llega al lugar y nadie sabe nada es imposible no sentirse doblemente cansado. Claro, nada se pierde con seguir preguntando, es básicamente laidea. Y entonces una amable señora de gorra, montada en un carrito de helados, nos da una pista -al parecer más segura-, “eso queda por Santa Apolonia, más arriba”. Suficiente para iniciar el regreso desde el otro polo justo cuando ya creíamos estar cerca.


Subir la ciudad le quita a uno el oxígeno, sobre todo si no tienes la costumbre de forzar los muslos y pantorrillas por el cemento inclinado. En Santa Apolonia, la gente cruza tranquila, pero no es el lugar, es solo una referencia. ¿Y El Estanco, señora? “Más arriba todavía, subiendo y a la izquierda, más arriba de la Avenida Perú”. Gracias, otra vez.


El paisaje ha variado bajo el mediodía que amenaza con llover. Luego, se abre perfecta a la vista una ladera sembrada de casas bien ancladas. Es el barrio El Estanco.


Las calles asfaltadas lindan con caminos de tierra, los pasajes estrechos con entradas amplias, las casas chatas -de barro y teja- con construcciones de material noble. No hay cartel de bienvenida al Estanco, es lógico, tampoco en los demás barrios.


Deseamos contactar con algún poblador que esté relacionado con la organización vecinal del Carnaval. Un grupo de adolescentes que escucha música en la vereda nos indica el nombre de alguien y la ubicación de su casa, luego suben el volumen de su pequeño reproductor de audio. Las calles que pisamos se separan en alturas diferentes, haciendo necesaria la conexión por gradas. Subir y bajar vuelve a tensionar los muslos y pantorrillas. La persona que nos señalaron no se encuentra, está de viaje. Buscamos a otros dirigentes.


El primer vecino con quien conversamos nos brinda información puntual sobre el barrio. Se percibe la seguridad en sus palabras. Dice que lo de “barrio peligroso” es solo un estigma de la gente que no conoce, de la gente de abajo, dice que las cosas no avanzan como deben pero que la gente es optimista aunque a veces haya bajones, precisa que siempre se necesitan obras.


A propósito, nos cuenta que la denominación “El Estanco” no ha sido siempre la misma. Antes se conocía como “El Estanque Grande”, por un pozo que existía en las cercanías. Nos explica, también, que este barrio es tan antiguo como cualquier otro. “Yo llevo viviendo aquí como treinta años”.


La señora Socorro y Don Segundo tienen una tienda. Son gente dispuesta. Nos confirman que el barrio es tranquilo y que si algún problema ha existido es por gente de otra zona. La señora Socorro fue vocal del comité del Carnaval en el barrio, y ha sido testigo presencial de cómo se resuelven -o intentan resolver- los gastos que significa la preparación para el evento festivo. No recuerda exactamente las cifras, pero deben ser –dice- unos mil soles los que el Patronato les asigna como partida. ¿Alcanzará?


El vestido de la reina bordea los trescientos sesenta soles, y si se toma en cuenta que utiliza tres como mínimo, y aumentándole a ello el precio de los zapatos, adornos, bandas y otros accesorios, la cosa se pone ajustada. Entonces se recurre a actividades, generalmente polladas, las que suelen dar ganancias de entre cuatrocientos a quinientos soles, claro, siempre y cuando la vecindad colabore. Existe en el aire una sensación de incertidumbre respecto a la participación para este año, y se entiende, tomando en cuenta que el año pasado no se presentaron debido a asuntos internos en el Comité.


Una calle aledaña se pone lodosa con el inicio de la lluvia. Allí encontramos a la señora Mari. Ella fue vicepresidenta del Comité Organizador, pero su condición de gestante la ha alejado temporalmente del cargo. Nos da otra explicación sencilla de cómo surgió el nombre del barrio, “porque se estancaba el agua, por eso es El Estanco”. Se ve entusiasta, a pesar de que el barrio puede ser sancionado con tres años de no apoyo económico por su ausencia en los Carnavales pasados.


Recuerda el nombre de algunas comparsas que presentaron anteriormente: “Las Fashion del Estanco” en mujeres, y “Los Oráculos” en hombres, los que tuvieron que trasladarse a pie hasta el mismo lugar de la concentración para el Corso. Recuerda también que un año su reina quedó en tercer lugar y que esto fue injusto porque pudo llegar a más, hasta el primer lugar, cree. Respecto a si este año sale el barrio aún está en veremos. Las partidas económicas para los barrios pequeños deberían ser mayores, precisamente, para incentivar el Carnaval. “Todo es gasto, desde chinches, agujas, cinta. Todo, incluso algunos vestidos son muy caros y solo se alquilan,…lo bueno es que la empresa privada ha apoyado también”. Mientras conversamos, nos muestra algunos trajes de campañas pasadas, son simples, casi transparentes, de bordados superficiales y colores fosforescentes. Los niños que juegan cerca la ayudan a desplegar unas banderolas mejor diseñadas con el nombre del barrio.


Así es “El Estanco”. Un barrio con mirador natural, un balcón poblado -comodiría su lema-, una pendiente de gradas y personas que se esfuerzan por llegar arriba, por salir adelante.


La Tigresa del Oriente quiso pegarle al bueno de Beto

Acorde con nuestro post anterior, ahora sí los dejamos con una nota de interés nacional y de indiscutible relevancia para el devenir político de la nación: La Tigresa del Oriente versus Beto Ortiz.

Los que vimos en vivo y en directo el primer y único round del encuentro nos quedamos con la sensación de "suave, ahí". Como que hicimos causa común para que la sangre no llegue al río, o mejor dicho, para que la cachetada no haga sanguinolento efecto, o como para que le presión (¿hipertensión?) arterial de La Tigresa no le juegue una (final) mala pasada.

Tranquilos todos. Ya pasó. Pero para los que quieren recordar...a partir del minuto 2:06.



Hoy Beto recuerda tan decoroso encuentro en su columna de PERÚ 21:
"Aunque ¡juax! bien podría haber sido también el atronador sonido del soberano cachetadón que doña Tigresa intentó encajarme la noche del viernes –en vivo y a nivel nacional– con esas sus célebres zarpas acaso extraídas de la más afiebrada fantasía sadomasoquista, con esos sus pérfidos mitones de cierto pelo, coquetamente adornados con aplicaciones de garritas punzocortantes que bien podrían haberme vaciado, por lo menos, uno de mis ojitos color caramelo o desfigurado para siempre –¡en la cara, no!– mi chaposita y lozana herramienta de trabajo sino fuera porque, en medio de uno de los más violentos ataques (de risa) de que he sido víctima alguna vez en televisión, atiné a esquivar a la muerte, deteniendo en el aire sus letales guantes de Freddy Kruger, sus uñas acrílicas de cantante criolla, sus aterradoras tenazas de Alien, el octavo pasajero. ¿Y qué hubiera pasado si lograba incrustármelas en la yugular? ¿Puede imaginarse muerte más gloriosamente televisiva que la de ser degollado en vivo por la mismísima Reina del YouTube? Guau. ¿No me convertiría así en el más twitteado, en el más searcheado, en suma, en el más webeado? Oh, Margot. ¿No daría acaso, mi tasajeado cadáver, la vuelta al mundo?"